Una muestra más de los efectos perversos de la contaminación y del daño que el ser humano, cuando actúa sin cuidado, puede causar al medio ambiente. El gigantesco cocodrilo lleva cuatro años con un neumático atascado en su cuello. Ahora, gente de todo el mundo quieren liberar al animal de este angustioso collar, antes de que termine matándolo. Por eso a finales de enero de 2020 una organización ofreció una recompensa al valiente que le quitara la rueda de goma al animal. «Hay mucha presión de los ciudadanos para que se ayude al cocodrilo que lleva desde el 2016 atascado, la gente quiere verlo». Eso explica el jefe de la agencia de conservación de recursos naturales (BKSDA) en Célebes Central, Hasmuni Hasmar, que ha promovido la iniciativa. El reptil de más de cuatro metros de largo vive en el río Palu, que atraviesa la ciudad del mismo nombre y capital de Célebes Central (en el centro del archipiélago indonesio). Las imágenes del animal, que paradójicamente es un ejemplar de agua salada, con el neumático de motocicleta en la garganta han dado la vuelta al mundo, pero la llamada del concurso no ha tenido éxito y no han conseguido que nadie se la juegue a cambio de cobrar la recompensa. Por eso, ahora la misma agencia está preparando a un equipo especial para liberarlo. «No nos rendiremos hasta salvar al animal. Hemos preparado instrumental para el equipo». No es la primera vez que la oficina de conservación intenta ayudar al cocodrilo. Tras el terremoto y tsunami que azotaron la región, se llevaron a cabo varios intentos para quitarle el neumático al cocodrilo. EL COCODRILO DE AGUA SALADA El cocodrilo marino, cocodrilo de agua salada, cocodrilo de estuario o cocodrilo poroso es una especie de saurópsido, es el cocodrilo de mayor tamaño...
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